Si, soy yo. La que llora cuando ríe, la que cuando tiene un mal día te grita, la que con sus amigas se pone en el medio de la calle a bailar y cantar. Se ofende por cosas insignificantes, la que a menudo se siente pequeña. La que en los días de sol se come el mundo y en los de lluvia se encierra con sus amigas en algún lugar para hablar. Hablo mucho, hago poco. Soy una neurótica, variable y supersticiosa que se juega la suerte con la cara y cruz de una moneda. Puedo ser cabezota, orgullosa, celosa, gritona, caprichosa, bipolar, cariñosa, risueña, soñadora, poco generosa, impredecible e impar. Me encanta la lluvia cuando estoy en la playa y el frío si tengo mantas. Me gustan los besos en la frente y las miradas transparentes. Soy muy cabezona y eso hace que obtenga siempre lo que quiero, aunque a veces las pague caras.